Wednesday, 20 June 2012

Proyecto La Guerra de los Mundos-Capítulo 2

 Para quien siga el proyecto que quiero llevar a cabo, aquí dejo el siguiente capítulo del primer libro (¡buf! solo de pensar el esfuerzo me echa para atrás):

   2.EL METEORO.
    Y llegó la noche en que cayeron los primeros meteoros. Uno de ellos pasó sobre Navacerrada, en dirección a Oriente, una línea llameante en descenso. La contemplaron centenares de personas que la creyeron como una estrella fugaz; pudo ser vista en Castilla y León, en Castilla La Mancha, en Galicia y en el norte de Portugal. Yo estaba durmiendo profundamente en casa a esa hora, la ventana de la habitación daba vista hacia el oeste, hacia las colinas y verdes bosques de la Meseta y de Quijorna, más allá de la calle de casas que hay entre la mía y el campo; nada vi del fenómeno más extraño en mucho tiempo. Algunos dicen que cuando pasó a unos pocos kilómetros de tierra empezó a producir un extraño silbido. Pese a que me perdí vislumbrar el proyectil bien que lo sentí cuando éste tocó tierra, pues produjo un temblor que duró 5 segundos; mi esposa se levantó de repente, levantándome a mí también, muchos otros vecinos también sintieron el temblor, pero tras una hora sin volver a ocurrir nada conseguí convencer a mi esposa de volver a dormir.
       Pero no todos se quedaron tan indiferentes aquella madrugada. El pobre Ramón había presenciado aquella estrella. Vió desde Villanueva de la Cañada como desaparecía en la llanada que había entre Brunete y El Palancar.
    Ahí estaba, alrededor de un agujero enorme, con la tierra salpicada a su alrededor hasta llegar a dos kilómetros de distancia, había llegado incluso a una carretera que conduce de Brunete hasta Boadilla del Monte en línea recta. Ardían los secos matorrales y las chispas de los cables de tensión arrancados saltaban de cuando en cuando.
     La Cosa yacía, casi del todo enterrada, pero la parte descubierta era colosal. El diámetro de aquello medía entre 25 a 30 metros. Ramón bajó del coche, se acercó hipnotizado por esa cosa que permanecía incandescente en medio del campo.
    Pronto oyó ruídos proviniendo de dentro. La extraña forma le hizo pasar por la mente de que eso igual no era natural pero su cabeza estaba muy abarrotada de pensamientos en ese momento como para llevar esa idea a su credulidad.
   Un ruído enorme se oyó cuando una parte de tierra quemada que había en lo alto de aquel cilindro cayó al suelo. Fue entonces cuando vió las luces de otro coche acercarse al lugar proveniente del Palancar. Del coche salieron dos hombres, vecinos de la urbanización despertados por el impacto.
        -¡¿Pero qué ha pasado aquí?!– exclamó uno.
        -¡Dios mío! ¿Qué es?- dijo el otro mientras se ponían al lado de Ramón, éste veía como el techo circular del cilindro comenzó a girar, era un giro muy lento que solo lo notó porque un pedazo de tierra quemada se hallaba 5 minutos antes en otra posición.
     Un chillido sordo surgió y estremeció a las tres personas, y la tapa del cilindro empezó a moverse más deprisa.
      Ramón exclamó entonces:
       -¡Dios mío! ¡Hay alguien encerrado allí, medio asado, que trata de salir!-
     Los 3 hombres olvidaron la sorpresa y bajaron por el cráter hacia el cilindro pero el calor, cada vez en aumento a medida que se acercaban, los detuvo antes de que se abrasasen. Fue entonces cuando Ramón dijo a los otros dos hombres que fueran a pedir ayuda mientras él iba a informar de lo que había caído.
     Treparon por el foso, se dividieron y cada uno tomó su coche. Ramón tomó dirección hacia Brunete. Eran las 6 y el sol comenzaba a asomar en el cielo. Mientras conducía cogió el móvil y empezó a llamar a numerosos contactos. Tras llamar a 5 personas, ya en Brunete tomó dirección hacia la casa donde vivía un amigo suyo periodista llamado Héctor, éste estaba durmiendo pero el constante llamar de Ramón le hizo despertar.
    Enfadado y con ganas de explicaciones, Héctor le abrió la puerta y antes de hablar Ramón saltó:
          -¡Héctor! –gritó- ¿has visto el meteorito de ésta noche?
          -¡No! Pero sí he oído hablar de… -dijo Héctor sin poder terminar.
          -Bueno, pues ahora está en la carretera que lleva hacia La Raya del Palancar.
          -¿Cómo?
          -¡Más además! ¡Es un cilindro! ¡Un cilindro perfecto! ¡artificial! ¡y hay alguien dentro!
       El periodista empezó a cambiar su rostro de enfado a uno de curiosidad, se puso su aparato contra la sordera para oir mejor el relato (Héctor era sordo de un oído).
      Tras la charla Héctor quedó perplejo. Corrió a su casa para vestirse y tomar camino hacia la llanada, Héctor llevaba su móvil en la mano por si hubiese que informar de la exclusiva. Llegaron, el cilindro se mantenía donde cayó, los ruidos interiores habían cesado, lo único que se oía era el aire quemado silbando alrededor del cilindro.
     Tiraron una piedra al cilindro para dar cuenta a los que habían dentro de que alguien estaba fuera, pero no hubo respuesta.
      Trataron entonces de dar ánimos a los que habían dentro, pensando que estaban intentando salir desesperadamente. Volvieron al coche y Héctor se puso a llamar como loco a varias personas desde su móvil.
       A las 8 de la mañana comenzaron a llegar curiosos para ver lo que les había despertado de madrugada. Precisamente, Ramón me llamó por móvil a esa hora para decirme lo que había pasado (cogí el móvil muy enfadado porque entre el temblor y las llamadas no iba a poder dormir bien). Tras esto, un cuarto de hora después, volvieron a llamarme, ésta vez de la editorial para la revista que trabajaba diciéndome que olvidase el artículo que debía hacer sobre las lunas jupiterianas y saliese a realizar uno sobre “lo que había caído al lado de mi pueblo”.
    Tras lo cual desayuné rápido y cogí raudo la bicicleta hacia el campo. No se me ocurrió la idea de encender la televisión para ver si decían algo.

Saturday, 16 June 2012

Proyecto La Guerra de los Mundos-Capítulo.1

Subo el "guión" del primer capítulo del proyecto. Para llevar a cabo la novela gráfica, lo primero que he hecho ha sido reescribir la novela original, adaptarla a la época actual, al lugar donde se desarrolla y a destacar la sociedad presente. De ésta manera estoy buscando una obra que tenga la fidelidad del libro pero que a la vez tenga sus diferencias sin que esto suponga su pérdida de espíritu. La cita de Karl Marx tiene que ver con la filosofía que pretendo mostrar durante el libro (aunque no es la única):




LA GUERRA DE LOS MUNDOS


LIBRO 1: LA LLEGADA DE LOS MARCIANOS


    “El hombre es el ser supremo para el hombre”.
      Karl Marx



1.- LA VÍSPERA DE LA GUERRA

Nadie hubiera creído bien entrados en el siglo XXI que la humanidad estuviese siendo observada por inteligencias superiores a éste de la misma manera que una persona mira a los microbios desde un microscopio, nadie se tomaba en serio el hecho de la vida más allá de éste mundo, era más un tema de entretenimiento que de estudio serio y preocupante.
    Seguros de dominar todo aquello que pisaban, el ser humano iba de un lugar para otro de manera masificada por todas partes, por tierra, mar y aire, sin dejar ni un lugar deshabitado en la Tierra. Dominaban, seguros de ello, el mundo. Sin embargo, a través del vacío del espacio, pero en los lugares más insospechados, dados por desolados; inteligencias que veían la nuestra de la misma manera que nosotros vemos la inteligencia de un animal de ganado; inteligencias vastas, frías e implacables, contemplaban esta tierra con ojos envidiosos y con lentitud, pero con seguridad, trazaban planes de conquista.
      El hombre, tan seguro de sus teorías científicas nunca llegaba a imaginar como en otros lugares del Sistema Solar, tan bien conocidos que los tenemos, pudiese albergar vida en atmósferas nocivas para la misma. Fue del planeta Marte, lugar descartado para tener actualmente vida, de donde se mostró de una manera tan violenta y triste, la existencia de vida superior incluso a la nuestra. Marte, planeta de atmósfera venenosa, con temperaturas que nunca superan los 0º, y donde solo hay un desierto de hierro oxidado; había sido comprobado de todas maneras, incluso enviando sondas hasta allá, de que no había vida alguna. Nos equivocamos. Bajo tierra, se hallaban kilómetros y kilómetros de ciudades que mediante tecnología increíble permitían la subsistencia de seres vivos. Todo esto se descubrió demasiado tarde.
      Nosotros, los hombres, debíamos serles para éstas criaturas tan poca cosa como nosotros miramos hacia las vacas de ganado. Por lo visto los habitantes de Marte debían estar ante una situación tan desesperada que se prepararon para la guerra y la enviaron a La Tierra.
      Pero antes de comportarnos como jueces y describirlos con excesivo odio debemos recordar y mirarnos a nosotros mismos, seres que hemos matado cruelmente, enviando a la extinción a miles de especies, mermando tierras fértiles, bosques llenos de vida transformados en desiertos de cemento; animales matados, no por la necesidad de comer, sino por simple diversión de matar; tenemos incluso verdaderas masacres justificadas simplemente porque son una tradición cultural. Últimamente más que nunca hemos hecho tanta calamidad a otros seres vivos como lo podían hacer los marcianos. Incluso hemos llegado a matarnos a nosotros mismos, como idiotas, por motivos tan estúpidos como la raza ó el estatus, nos hemos peleado por intereses y avaricias repugnantes de egocentricidad, con nuestra arrogancia siempre por delante, hemos provocado guerras por intereses en nuestra satisfacción y beneficio. Y a pesar de que muchos de nosotros no seamos unos asesinos, tenemos una actitud individualista y egoísta, nos tratamos como objetos de usar y tirar, como cifras numéricas insensibles, como una masa descerebrada que poco a poco nos transforma en monstruos. ¿Somos merecedores de criticarlos porque actuaron sobre nosotros como nosotros solemos actuar contra el resto de especies? 
     Hace ahora un año que la tragedia  cayó sobre el mundo. Marte no estaba en la posición más cercana con La Tierra, eso ocurrió en 2003 y tardaría 3 siglos en volver a estar tan cerca, nadie sospecharía y la observación al planeta es más compleja. Pero su despegue del planeta se hizo conocer. Yo además fui uno de los privilegiados en ver, en directo, como de Marte surgían los objetos que tanta calamidad traerían. Tuve suerte de tener un amigo astrónomo, que conocí en una entrevista, el cual me invitó la noche en la que se produjeron las primeras señales desde Marte, ya de paso, tomaría apuntes para el artículo que debía escribir.
      Conservo el recuerdo de aquella noche: el observatorio de Yebes estaba oscuro y silencioso, tan solo una linterna nos iluminaba junto con un ordenador, el único sonido era el débil ruido que hace un ordenador cuando por él pasa la electricidad, Ramón Barbero (que así se llamaba mi amigo astrónomo) se movía inquieto por lo que acababa de ver. Me invitó entonces a echarle un ojo al telescopio, precisamente, estaba éste aparato mirando a Marte porque se lo había pedido. Ahí estaba esa pequeña bolita luminiscente ¡tan poca cosa era! parecía que temblaba pero era el mecanismo del telescopio lo que temblaba.
      Al observarla, veía otros tres pequeños puntos luminosos, lejanas estrallas que se encontrarían a años luz de aquí. Invisible para mí, no me percaté que venía la Cosa que nos enviaban, recorriendo cada segundo miles de kilómetros, una Cosa que nos traía a La Tierra tanta muerte y desgracia. No pensaba en ella al tiempo de observar, de hecho Ramón me había dicho que parecía un asteroide inofensivo.
      Hubo también aquella noche otro estallido de gas en Marte proveniente de algún enorme aparato que eyectaba esas Cosas hacia aquí. Yo lo vi. Fue un rojizo relámpago en el borde; se lo dije a Ramón y se colocó en mi puesto. Era una noche muy calurosa, cogía tambaleándome una botella de agua bien fresca mientras Ramón exclamaba al contemplar las irregularidades que estaban sucediendo en ese desolado planeta.
      Al día siguiente, después de la primera marea de gas en Marte, otra explosión similar sucedía, lanzando algo hacia La Tierra. Recuerdo que al sentarme otra vez veía como el planeta rojo se me hacía verlo de color verde. Ramón se quedo observando hasta las dos de la mañana. Decidimos volver a su casa. Por debajo de nosotros se extendían el pueblo de Yebes y otros más iluminados en naranja y silenciosos, donde miles de personas dormían en paz.
      Ramón me hablaba en el coche en exceso. Dijo que igual eran asteroides provenientes del cinturón que hay entre Júpiter y Marte y que a lo mejor alguno se habría chocado contra Marte, expulsando material a su atmósfera.
  -A lo mejor son los marcianitos –dije yo bromeando-.
Se rió cuando bromeé de ello.
   Ni por asomo podía haber nada de vida allí -dijo después de reir-. Ya sabemos de sobra que no hay nada…ese fenómeno ha debido de ser alguna piedra…
      No fuimos los únicos, por supuesto en todo el mundo los observatorios vieron aquellas explosiones en Marte, y al día siguiente igual, y al siguiente, y así hasta diez noches. Los disparos explosivos eran tan violentos que tras la décima oleada, el planeta Marte quedó envuelto en una capa de nubes verdes que quitó su color rojo. Vi esto en las noticias, pues fue una noticia realmente excéntrica.
      De todas formas, nadie decía que esto era producto de alguna especie que habitaba allí, todo lo deducían a fenómenos naturales. La vida extraterrestre era un tema que nunca se había tomado realmente en serio. Sí, se han hecho infinidad de libros y películas sobre ello pero no era un tema atractivo para alguien serio en la ciencia, la sociedad encajaba a los aficionados a los extraterrestres muchas veces dentro de ese grupo social aficionado a la ciencia ficción. No era un tema preocupante y era ajeno a las verdaderas luchas de la sociedad, desde luego, esto luego dio un giro enorme.
      La noche del décimo disparo estaba tranquilo tumbado en la hamaca al lado de mi esposa, mirando la noche estrellada de aquel cálido mes de mayo. Todo parecía seguro y tranquilo.

Friday, 15 June 2012

Proyecto de las Criaturas de los mitos urbanos.

   Ésta es la última serie de cinco ilustraciones que he creado. En éste caso me introduzco en el tema de la criptozoología y de diferentes seres que todos conocemos gracias a historias, leyendas urbanas y películas. Añado una descripción de cada uno de ellos. La figura protagonista (lo que sería la criatura y su posesión) está ennegrecida, solo es una silueta; ésto lo hice para llevar a la atmósfera de misterio y extrañeza en la que se crearon las criaturas. Después de todo, la mayoría de los seres extraños y nunca vistos nacen en realidad en las historias místicas, en los rumores intrigantes o en relatos populares, y luego estaría la historia de ficción. Muchos de éstos seres a menudo son versiones adulteradas y remoldeadas de animales reales, de hecho, lo que muestro como silueta no es la criatura en sí, sino el animal real que más se parece a como se les describen en las leyendas e historias. Comencemos y así entenderemos:


  -EL Chupacabras=Chacal:

   Su mito nació en Puerto Rico pero se ha extendido a lo largo de América Central y del Sur. Se le han atribuido diferentes versiones físicas, desde un reptil hasta una especie de cánido que se alimentaba de la sangre de varios animales, mayoritariamente de rebaños de ovejas y cabras. Algunas investigaciones creen que son mordeduras de coyotes. Debido a que la versión más popular es la de una especie de cánido grande, el chupacabras de la ilustración es la silueta de un chacal. En la escena está sorbiendo la sangre de su especie favorita: una cabra común. El paisaje es el suelo propio de una zona desértica como lo es el sur de Estados Unidos y buena parte de México, lugares donde el mito ha cobrado más fama.
              Boceto preliminar hecho a lápiz y folio del Chupacabras





     -Mapinguarí=Oso:
    Se trata de una especie perteneciente a la mitología del Amazonas. Se dice que éste animal antes era un chamán nativo que descubrió el secreto de la inmortalidad y que por ello fue condenado a transformarse en una especie de oso gigante, de pelo rojo, rostro humano y muy maloliente. Se le ha representado muchas veces como una especie de perezoso enorme, un simio gigante o un oso. En la ilustración, la negra figura del Mapinguarí pertenece a la de un oso pardo caminando por las boscosas y verdes selvas del corazón de Sudamérica. Tiene a su lado un rácimo tirado de plátanos debido a que en la leyenda el Mapinguarí se alimentaba principalmente de plátanos.






      -Gris=Ser humano:
      En 1947 sucedió un extraño evento en Roswell, Estados Unidos, que significó el principio del fenómeno OVNI y la ufología. Vagos son los reportes que hay de lo sucedido y, como toda clase de mitos populares, existen infinidad de versiones y explicaciones. Pero en principio lo que sucedió es que un Objeto volador no identificado se estrelló en el desierto de Nuevo México, los ocupantes de dicha nave han sido descritos como seres bajitos, cabezones, de color gris y grandes ojos negros (descripción que claramente se nos ha mostrado de sobra en la ciencia ficción). No existen pruebas de ello y la pronta negación de Estados Unidos provocó el inmediato nacimiento de las teorías conspiracionistas. En cuanto a la obra, se muestra al gris que no es sino una versión modificada de un cuerpo humano. El “gris” es perseguido por varios vehículos iluminando de frente la escena, que se trata de un campo desértico en plena noche (con una iluminación naranja, símbolo de la cercanía de algún pueblo), se ve también el OVNI estrellado.





       -Bestia de Gévaudan=Lobo:
        A mediados del siglo XVIII en Francia caminaba una bestia terrible que devoró a varias decenas de personas, sobre todo mujeres y niños, cuyos cuerpos quedaban horriblemente mutilados. La bestia hacía la mayoría de sus sangrientos festines en Lozère y otras regiones del centro de Francia. Fue tal pavor el que desató, que hasta se crearon partidas de cazadores por todo el país para acabar con aquella temible criatura. Numerosos testigos lo describían como una especie de enorme lobo, de más de dos metros, con afilados colmillos y de oscuro pelaje. Éste ser fue finalmente cazado, pero realmente pocos asesinatos tenían que ver con aquella bestia, que no era más que un lobo un poco más grande de lo habitual, y la mayoría eran asesinatos por parte de otros animales o incluso de otras personas que aprovecharon aquel pánico para cometer violentos crímenes y violaciones y llevarle la carga al mítico monstruo. La ilustración desenmascara lo que era realmente la criatura: un lobo. En el dibujo acaba de matar a una de sus víctimas en medio del campo, se ve un paisaje alpino y unas ruedas de paja, error metido adrede, pues la técnica de enrollar la paja de esa manera se creó a partir del siglo XIX con la Revolución Industrial y la llegada de la maquinaria al campo.
                         Boceto preliminar hecho a lápiz y en folio de la Bestia de Gévaudan.






            -Marcianos=pulpos:
          La figura del hombre proveniente de otro mundo y con una morfología tentacular propia de un invertebrado tiene su origen en la primera novela que trata una invasión extraterrestre: La Guerra de los Mundos. Los marcianos son, de acuerdo con la descripción del libro, verdaderos pulpos gigantes. En éste caso el dibujo no solo entinta a la especie protagonista sino también a su maquinaria, en la ilustración se muestran dos aparatos que usan los marcianos: la Máquina de Guerra, que es una especie de trípode gigantesco acorazado, y la Máquina de Mano, un aparato parecido a un gran cangrejo de cinco patas con incontables tentáculos. La escena podría decirse que está sacada de la novela; en la parte inferior se puede ver un agujero donde están los marcianos, no es el agujero sino un cráter creado por el vehículo que usan los marcianos para llegar a La Tierra: un cilindro metálico (se ve parte de él en el extremo izquierdo del dibujo). En dicha escena vemos una serie de “venas” rojas que recorren todo el paraje; se trata de la Hierba Roja, que en la novela llega con los marcianos y se expande de manera explosiva por todos los lugares. Luego vemos al fondo un pueblo destruido con una arquitectura típica en las construcciones de la Inglaterra neogótica del siglo XIX (época y lugar donde transcurre La Guerra de los Mundos). Los dos cadáveres humanos son una representación del uso que sacan los invasores a la gente, que no son sino comida que cazar y devorar.






    Éstas son las 5 ilustraciones. Disculpen por la calidad de las imágenes, pues se pierden muchísimos detalles en todos los dibujos, pero es que la cámara que tengo es malísima y ésto empeora cuando hay que hacerle las fotos a unos rollos de papel que no se pueden sostener bien. Éstos dibujos miden 1,40x1,20 metros y en ellos empleé bastantes técnicas: la tinta china para las figuras protagonistas (los monstruos), el acrílico y la acuarela para el paisaje y los rotuladores negros (de varios grosores) para los contornos, más luego algo de boli para algún detalle menor. Disfruten de ellas.

Wednesday, 13 June 2012

Bocetos del proyecto "La Guerra de los Mundos"

Éste es un proyecto que algún día quisiera llevar a la realidad, pero sé que me costará bastante tiempo realizarlo, es difícil pensar si merece la pena llevarse tanto tiempo en crear algo que no sabes si va a ser un buen paso en tu creación o va a quedarse metido en un oscuro cajón sin que nadie sepa de su existencia. Todo se verá pero algo hay que hacer si quieres llegar a ser algo. En fin, aquí unos bocetos preliminares y muy primitivos del enorme proyecto que quiero llevar a cabo, se trataría de llevar a novela gráfica el famoso libro de H.G. Wells "la guerra de los mundos" (mi libro favorito, por cierto). No cuento más porque hay mucho que hacer y no conviene ilusionarse demasiado. Cuelgo éstos dibujos para que sirvan de blindaje al proyecto que quiero llevar a cabo:




El dolor del amor

¡Lo encontré! El dibujo hermano del "dolor de la amistad" no estaba perdido ¡menos mal!
 



El parecido técnico con su "hermano" refuerza la relación entre ambos. Si en el otro hablaba de la frustración y daño que a veces provocan las puñaladas traperas o las malas relaciones de amigos en éste otro hablo, aunque pueda parecer un tópico, del dolor que provoca el amor carnal. En el dibujo se muestra en figura iluminada a una persona arrodillada, levantando los brazos en alto como si ya no pudiese más del sufrimiento. Las figuras negras son todas siluetas femeninas, está claro que el punto de vista sería más bien masculino que femenino, éstas figuras negras se dividen en dos filas: por el lado derecho, se pueden ver unas tres (en realidad son cuatro, pero una está tan camuflada y difusa en la oscuridad que casi no se puede percibir) figuras portando armas de mano, retirándose del escenario, ya han dejado testimonio de su presencia. Y por el lado izquierdo hay una fila infinita (no se ve el final en el dibujo) de figuras que entra hacia dentro del dibujo, a medida que se acercan se les van viendo las armas que portan y los carácteres que muestran, como si se viese ya lo que va a ocurrir.
 Por si no se entiende todavía, la obra vendría a representar la fila de males de amores, de esas relaciones y amores platónicos (duelen más incluso) que acaban mal o perjudican más que curan que pasan por la vida de uno.
La figura blanca sería el personaje en el que se centra la obra, él es el protagonista; pues el dibujo narra su pasado y su futuro visto desde el tema de relaciones. Está lleno de "rayas" negras, que en realidad son las heridas que han dejado las infames de las que se ha enamorado. Heridas negras, que destrozan el espíritu del hombre (de ahí que en el dibujo se vea que se está fugando a la derecha chorros blancos, como si su alma se fuese). Llora color rojo debido a que sus ojos se están transformando en unos similares a los de las "acuchilladoras". Su boca escupe marrón por lo mismo que ellas llevan también la boca marrón, por la similitud de sus personalidades. El suelo cercano a la figura blanca tiene charquitos de tinta negra como si fuese la sangre derramada del hombre blanco.
Los seres de la derecha, los que se retiran, son las mujeres que ya han dejado en el hombre blanco una herida en su ser. Se retiran sonriendo maléficamente o con indiferencia (de la misma manera que un verdugo acaba con su víctima, como si fuese algo normal en su día a día), como queja de que no se ponen en el lugar de la otra persona, como si hubiesen salido aventajadas por ello. Cada una porta un arma diferente, ésto es una relación directa entre el arma que llevan con lo profunda que ha sido la herida (la de la alabarda ha hecho bastante pupa); poco a poco se van yendo al olvido. Sus armas están negras por el daño que han hecho.
Los seres de la izquierda son las que vienen...La que está clavando la espada en la piel del hombre es el caso actual y presente de sufrimiento en el dibujo. Las que tienen una cara más o menos visible y unas armas que ya se las ven venir son premoniciones de las que podrían ser "las siguientes" en hacer heridas. La fila es interminable, una premonición y sensación terribles de que ésto no va a acabar y el amor va a ser ir de herida tras herida (sin apenas haber beneficio alguno en la relación). Todas llevan ojos rojos como signo de maldad y vacío en su personalidad, las armas que llevan son blancas (menos las de la que ya está apuñalando) debido a que todavía no se han empapado del negro sufrimiento del hombre blanco, las armas son también diferentes porque cada una lleva un "grado" de dolor que provocarán. Sonríen también maliciosamente de la misma manera que las que se retiran, pero por ganas y no por satisfacción. Siguen una línea que les lleva hasta el objetivo, pero no es una línea que ellas siguen, sino más bien una línea visual para que la siga el que vea la obra.
   El ambiente es difuso para el fondo, debido a la confusión de los hechos personales en ésto. El amarillo acrecienta la sensación de enfermedad, de malestar; el rechazo amoroso no es precisamente algo que te haga sentir fenomenal.
Advierto, no hay contenido machista, más bien un relato de la experiencia individual. Si la obra parece ser un ataque a la mujer es más bien debido al "ataque" que he tenido por su parte (todos sufrimos, no nos vendría mal pensarlo), Ésta obra es quizás de lo más personal que tengo; es pesimista y negativo, lo sé, pero es lo que ha habido. Ojalá todo hubiera sido más bonito (y yo el primero en desearlo) y sí, es cierto que dicen "pues piensa en positivo", muy bien, eso es muy cierto, pero cuando las cosas salen mal pues salen mal, y ya no hay remedio.
  Técnicamente hablando, la obra mide lo mismo que su gemelo: 1,20x1,40 y está hecho con tinta negra, con acuarelas, pastel y acrílico blanco. Le dedico está obra a Ester, Inés, Isabel y Judith y otras tantas arpías por la "inspiración" que me han dado para llevar a cabo ésta obra.

Imagen a mejor resolución:

Thursday, 7 June 2012

El dolor de la amistad

Obra posterior a la de "lo natural y lo artificial", fue creada en marzo de 2012. Ésta dibujo y otro más que me temo que lo he perdido hubiera compuesto un díptico de "dolores". Tanto ésta obra como la extraviada son quizás las obras más personales que he creado por ahora y representarían varias experiencias personales, a la par que tristemente ocurridas...de todas formas, a muchos nos pasa. El dibujo representa a alguien a la izquierda marginado, rechazado por los demás. Los personajes son niños (bien se nota en el personaje blanco). En pocas palabras, el grupito de la derecha son niñitos que son amigos entre ellos, se hablan bien, se llevan bien, se dan bien por el c...Ejem, pero mantienen una actitud malévola y cruel hacia el débil chico de la izquierda. Los seres de la derecha tienen sus ojos rojos, símbolo de lo malos que son; tienen la figura alargada y borrosa, pues son unos espectros dañinos; tienen líneas irregulares, envolventes y retorcidas, pues su personalidad es tan retorcida y deforme como dichas líneas; les ilumina los rostros una luz amarillenta que no sale de su círculo, al igual que su personalidad; son de figura oscura, pues sus almas son tan negras como el carbón. Son cerrados entre ellos, ante el chico blanco sobre todo, hasta uno pone la palma de la mano hacia él como impidiéndole pasar.
El chico de la izquierda sin embargo es blanco (hay que prestar sobre todo atención a su mirada blanca) debido a la bondad de su ser, al menos en comparación con los "otros", pues a menudo muchos chicos que no se dejan engatusar por malas personalidades, chicos que son ninguneados a menudo son maravillosas personas y tienen bastante bondad que dar. La figura blanca es también algo débil, pues la gente en situaciones así a menudo se debilitan puesto que han luchado más de lo normal. La figura blanca tiene el cuerpo mirando opuestamente al grupo para reforzar su marginación, y su cara mira triste hacia los otros, pues lamenta por un lado no ser aceptado como los demás. Predomina en él el negro, pues se le ha ensombrecido en una pequeña sociedad. Está sentado en una especie de arco, pues al ambiente en el que se le empuja es una zona oscura y cerrada.
Por el ambiente hay varias líneas, en el centro del vacío que separa al grupo y al chico hay un punto de fuga del que surgen varias de ellas, acrecentando aún más la separación de los dos mundos que aquí vemos: el del grupo y el del lobo solitario, polos opuestos en un mismo dibujo. El ambiente además es oscurecido (lo único blanco que hay es el chico solo) para que así destaque mejor el blanco, el blanco sobresale mucho más que los que se funden en un anonimato seguro...

   El dibujo mide 140x120 centímetros y está hecho sobre un papel de rollo. Las técnicas que empleé fueron la tinta china, las acuarelas para el color y el acrílico para el blanco (me dejé medio bote de pintura para que quedara bien blanquito).
   Le dedico ésta obra a todos los grandísimos malnacidos y malcriados imbéciles odiosos que tuve de niño y adolescente como "amigos"...me avergüenzo de tener que usar éste término incluso para hacerles referencia. Y a los demás, entiendan un poco el rencor que siento hacia ellos, pero es mucho mejor liberar ese rencor y enojo hacia los males del pasado mediante la expresión artística que mediante formas violentas y agresivas.

Imagen con mejor resolución:

Lo natural y lo artificial.

Sencillo título, pero es lo que en pocas palabras se muestra en éste siguiente dibujo. Éste dibujín lo terminé en enero de éste año (posterior al de el caso de Lampedusa). Se trata de un díptico donde el dibujo de la izquierda muestra el orden, la armonía y la perfección de la naturaleza y al lado derecho se muestra el orden impuesto, el caos, la pérdida de control y la creación de la humanidad, lo artificial. Seamos sinceros, la naturaleza mantiene un equilibrio entre todas las especies y el ambiente que rodea, otra cosa es que la naturaleza no está creada solo para una especie (no nos vendría mal recordarlo) y ésta especie, en pro de "mejorarla" (solo para su propio regocijo) al final le acaba saliendo el tiro por la culata, como bien nos están mostrando los cada vez más frecuentes desastres naturales.
En la obra muestro el lado artificial, el lado humano como la parte caótica, pues nuestra creación cada vez más hace evidente que se nos está yendo de las manos y que ésta va a ir algún día en nuestra contra, de ahí que lo dibuje como un caos incontrolable. Por otro lado está la rectitud y perfección de la naturaleza, donde su vida ha sido siempre una perfecta adaptación (con constantes batallas, claro) al ecosistema que lo rodea, el color verde es debido a que éste es el típico color que más abunda en las especies, sobre todo en las florales. El verde oscuro crea un tímido monte redondo sobre el que la cima hay un arbolito y el verde claro es...el cielo. Por otro lado, se muestra como la mano inquisidora del hombre va atacando, va artificializando e invadiendo el mundo natural, imponiendo su corrupción y desorden. Pero la naturaleza es poderosa, y por aquellos rincones dominados, por aquel mundo exclusivo de lo artificial, surgen pequeñas resistencias de la naturaleza (para que veáis que ésto es cierto pararos a mirar alguna farola o esquina de la pared y veréis algún hierbajo creciendo) en donde en la obra aparecen como pequeñas neblinas verdes en el mundo del caos (el del hombre):
  La obra está compuesta por 2 papeles Basic de 100x70 cm, la suma no es muy difícil, el díptico en sí mide 100x140 cm. Las técnicas empleadas son las acuarelas verdes, la sanguina negra y la tinta china.

Obra a mejor resolución: